Quizá has escuchado hablar sobre la condonación de deudas pero no sabes bien en qué consiste o cómo se llega hasta este procedimiento. A continuación, te damos todos los detalles que debes conocer al respecto.

A qué se llama condonación de deudas

La condonación de una deuda es el perdón de la misma. Aunque pueda parecer algo imposible de conseguir, en ocasiones los acreedores prefieren recurrir a esta opción porque intentar cobrar el dinero que se les adeuda es más costoso de lo que van a acabar recibiendo. Un ejemplo claro se puede ver cuando un acreedor tiene que recurrir a abogados y demás para intentar cobrar una deuda no demasiado elevada.

En estos casos es fácil que el esfuerzo que le implique emocionalmente y el coste acaben teniendo un valor mayor que el del dinero adeudado y decida optar por la condonación de la deuda.

Cómo realizar la condonación de deudas: tipos

Aunque se puede optar por condonar una deuda de diferentes modos, lo cierto es que para obtener la máxima seguridad a nivel legal lo recomendable es hacerlo mediante estas vías. Lo cierto es que una condonación se puede hacer de manera verbal o tácita, pero lo más recomendable siempre es hacerlo ante una notaría.

Por otro lado, se han de tener en cuenta aspectos como si se está condonando una deuda privada o pública y si se hace de manera voluntaria o forzosa.

Condonación de una deuda pública

Es poco frecuente que se produzca una condonación de una deuda pública porque esto implica que una administración del Estado perdona una cuantía que se adeuda, por ejemplo, los impuestos. Esto es algo que sí se puede obtener si se cumplen los requisitos y la persona física se acoge a la Ley de la Segunda Oportunidad. En este caso, se puede lograr la condonación de hasta 10.000 euros con la Agencia Tributaria y otros 10.000 euros con la Seguridad Social, por ejemplo.

Condonación de una deuda privada

La condonación de una deuda en el ámbito privado sí es mucho más frecuente. Ante la ley pasa a ser una donación. En este sentido, puede ser una condonación de la deuda conforme a la voluntad. Se produce cuando el acreedor no le quedan demasiadas opciones de cobro y decide renunciar a ello.

Por otro lado, también está la condonación forzosa. Cuando el acreedor debe renunciar porque el deudor está en bancarrota y no va a poder hacer frente al pago en ningún caso.

Condonación total o parcial

En ocasiones, se puede optar por la condonación de la deuda parcial y no total. Obviamente, cuando se recurre a la condonación total se renuncia al cobro de la totalidad de la deuda, es decir, el capital pendiente y los intereses derivados. 

Por su parte, las condonaciones parciales hacen referencia a la renuncia de una parte de la deuda. Por lo general, suelen ser los intereses derivados de la misma. De este modo, el acreedor recupera parte del dinero y el deudor puede hacer frente de manera más sencilla al pago de la cuantía.

¿Puede acogerse todo el mundo a la condonación de una deuda?

Es el acreedor el que tiene la potestad para realizar la condonación de una deuda. El deudor puede solicitarlo o sugerirlo, pero será el acreedor el que tenga que decidir si acepta o no esta situación. En el momento en el que el acreedor acepta la condonación de la deuda será irrevocable. Con esta medida, el acreedor ya no podrá reclamar el dinero o crédito que pudo dar en su momento. 

Condonación de deudas y la Ley de Segunda Oportunidad

Todas las personas físicas pueden acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, un mecanismo legal que permite el perdón de parte o la totalidad de una deuda. Para ello se han de cumplir una serie de requisitos, siendo el más relevante encontrarse en situación de insolvencia.

Al acogerse a este mecanismo, el deudor podrá conseguir la condonación de deudas que de otro modo le sería muy complicado. Especialmente si mantiene deudas con la administración pública o entidades financieras. A través de este mecanismo, la persona puede volver a empezar de cero a nivel financiero y salir también, en caso de que esté, de los ficheros de morosos. En definitiva, es un mecanismo que permite al particular poder volver a empezar a nivel financiero su vida, libre de deudas que no puede afrontar.

Si te encuentras en esta situación, lo mejor es que te pongas en contacto con nosotros. En Ecualitas somos expertos en la Ley de Segunda Oportunidad y podremos ayudarte con la condonación de deudas, etc. Estudiaremos tu caso para ver cuál de todas las opciones puede ser la más recomendable en tu caso y ponerla en marcha. Empezar de nuevo es más fácil de lo que crees. ¿Hablamos?