La Ley de Segunda Oportunidad es una puerta para liberarte de deudas y volver a empezar, seas particular o autónomo. Pero, ¿ya sabes cómo aprovecharla correctamente? No te preocupes, aquí te decimos cómo...
7 consejos para aprovechar la Ley de Segunda Oportunidad
Antes de nada, recordemos que la Ley de Segunda Oportunidad está vinculada a una serie de condiciones previas: imposibilidad de pago, buena fe del deudor, mayoría de edad, no tener antecedentes penales en fraude o estafa, contar con más de un acreedor, no deber más de 5 millones de euros y no haberse acogido a la ley en los últimos 10 años. Si los cumples, puedes aprovecharte de las ventajas de esta opción.
Ahora bien, para sacarle el máximo partido, es conveniente que tengas estos puntos en cuenta. Por este motivo, los describimos en orden cronológico para que no tengas problemas:
1. Comprueba antes si existe posibilidad de acuerdo de pago
A veces, es posible apurar las posibilidades de pago con los acreedores. En muchos casos, estos prefieren asumir una quita parcial (de un 20 o 30 %) a la expectativa de estar durante años pleiteando, sobre todo si perciben que es probable que pierdan. Considerar esta cuestión es especialmente útil e, incluso, hay fases previas en la segunda oportunidad para alcanzar a un acuerdo sin llegar a juicio.
2. Recopila toda la documentación que necesites (toda)
La fase de recopilación de toda la documentación es indispensable, porque esta es la que justificará la idoneidad de acogerte al concurso. Algunos ejemplos paradigmáticos de lo que indicamos son el DNI, extractos bancarios, documentos de las deudas, registros de la propiedad de viviendas y vehículos, Declaraciones de la Renta y justificantes de nóminas, pensiones o prestaciones por desempleo.
Es sumamente importante que no te olvides de ningún detalle referido a los documentos. No en vano, si obvias la documentación, aquí puedes tener problemas o que se malogre el expediente ante el juzgado.
3. Pide el BEPI cuanto para beneficiarte de la Ley de Segunda Oportunidad
La Ley Concursal indica que se tiene que iniciar la fase de preconcurso cuanto antes, concretamente cuando se sepa que es necesario. Este es un elemento imprescindible para que se pueda acreditar la buena fue del deudor, que es determinante para que se apruebe el BEPI.
En el caso de la Ley de Segunda Oportunidad, si vez que no hay posibilidad de negociación, pide el BEPI cuanto antes, porque, además, te servirá para que se congelen las ejecuciones de embargos y para que no aumenten los intereses, en caso de que lo obtengas.
4. Haz cálculos de lo que debes para mantener la vivienda
En ocasiones, es posible mantener la vivienda incluso acogiéndote a la LSO. Los dos principales supuestos son que el valor de tasación de la vivienda esté por debajo del importe de la hipoteca pendiente o que te aprueben una exoneración parcial de la deuda con un plan de pagos a 5 años. Por lo tanto, haz ese cálculo de una forma clara para que la solicitud se ajuste a tus objetivos.
Hay que señalar que, en los últimos años, la posibilidad de mantener la vivienda o de saldar la deuda mediante la dación en pago se ha multiplicado. No está de más, pues, que hagas esta consulta.
5. Valora una exoneración total o parcial
Otro punto esencial que debes considerar es si te interesa una exoneración total o parcial de la deuda. Por lo general, lo primero te interesa si no tienes patrimonio propio y tampoco la capacidad de satisfacer las deudas. El segundo caso es factible si tienes una capacidad limitada de pagar a medio y largo plazo. Contar con el asesoramiento de una empresa especializada en estos procedimientos te puede ayudar a ver qué te interesa más.
6. Cumple escrupulosamente con el plan de pagos
El plan de pagos, si se concede una exoneración parcial de la deuda, se concede por un máximo de 5 años. Y, además, es fundamental que recuerdes que, si no pagas en tiempo y forma, se revocaría el BEPI y los beneficios conseguidos hasta la fecha. Por lo tanto, este es un tema en el que no hay espacio para descuidarse.
7. Establece una planificación de ingresos y gastos a posteriori
La planificación de ingresos y gastos a posteriori se debe tener presente después de conseguir el BEPI. Y esto significa ver dónde estabas gastando de más y redimensionar tus ingresos y gastos adaptados a tu situación económica. De esta manera, evitarás que tengas que volver a acogerte a esta ley en un futuro.
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